ALGARROBO
El fruto del algarrobo (la algarroba), es una vaina de color
castaño que puede llegar a medir hasta treinta centímetros, contiene una pulpa
de consistencia gomosa, sabor dulce y agradable, que rodea a unas pequeñas
semillas. Su nombre proviene del árabe y el árbol es originario del
Mediterráneo.
Usos medicinales:
El fruto fresco actúa como laxante, sin embargo su harina,
es antidiarreica y tiene la propiedad de absorber las toxinas del conducto
digestivo.
Por su aporte en fibra, ayuda a regenerar la flora
intestinal, disminuyendo bacterias e incrementando la flora de los
lactobacilos, convierten el líquido en gel coloidal, distienden las paredes
intestinales y estimulan un correcto movimiento intestinal.
La resina del algarrobo es recomendada para los tratamientos
del asma, cistitis, laringitis e indigestión, además de ser un excelente agente
expectorante, limpiando de esta manera las vías respiratorias.
La presencia de taninos (antioxidantes) que evitan la
formación de células cancerígenas, actúan como antinflamatorios y
antirreumáticos.
Algunas recomendaciones para el uso de la harina del
algarrobo:
La harina es soluble en líquidos, por lo cual puede
mezclarse rápidamente con agua o leche, sin necesitar cocción. Como dijimos,
con la harina tostada y agua se elabora una exquisita torta horneada conocida
como patay, que puede consumirse a modo de turrón.
La harina de algarroba puede tomar el lugar del
chocolate en la preparación de tortas y postres. Se utiliza directamente en
lugar del cacao en polvo para incorporar en masas. Si se pretende usarla como
baño cobertura, basta esparcir la harina de algarroba sobre agua caliente,
remover bien y añadir un poco de aceite o manteca para compensar su falta de
sustancias grasas con respecto al chocolate. A continuación una serie de
sugerencias para incorporarlo en platos dulces y salados.
RECETAS CON HARINA DE ALGARROBO
- Bocaditos de avena y algarroba
Hervir por 5 minutos, revolviendo con cuchara de madera, 300
gramos de avena arrollada gruesa, 5 cucharadas de azúcar rubia, 5 cucharadas de
pasas, 4 cucharadas de algarroba, con 450 cc de agua. Poner con cuchara en
bandeja aceitada y hornear.
- Trufas de algarroba
Mezclar y cocinar por 5 minutos: ¾ taza de avena arrollada,
½ taza de azúcar rubia, 6 cucharadas de aceite, 3 cucharadas de leche de soja y
2 cucharadas de algarroba. Una vez tibio formar las trufas.
- Arroz con leche con algarroba
Hervir por 10 minutos un litro de leche de soja, con dos
tazas de arroz integral cocido y 3 cucharadas de algarroba. Agregar una
cucharada de fécula de maíz disuelta en ½ taza de agua. Hervir 5 minutos.
Apagar. Endulzar con 3 cucharadas de miel